cuando las piruletas son obras de arte

26.9.17
En Japón, carvar y moldear el azúcar para convertirlo en piruletas artísticas y realistas es un arte ancestral y tiene un nombre: Amezaiku. Se calienta el azúcar a 90 grados y se trabaja luego con las manos y unas tijeras tradicionales.

Shinri Tezuka es el dueño de la tienda de dulces Ameshin y un auténtico maestro de este arte que existe desde el siglo VIII. Al ver sus creaciones hiperrealistas, no sé yo si me atrevería siquiera a comerme una de estas piruletas ¡Son impresionantes!





  1. Simplemente alucinante, que maravilla

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  2. Son magníficas. Yo tampoco podría comerlas, me sentiría mal de destrozar algo tan bonito.

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  3. No me comería la de la serpiente ni loca de tres días ^_^

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    Respuestas
    1. ¡Está super bien hecha, da un poco de cosilla la verdad!

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